El chef Mario Clemente y su hermana han seguido con la tradición de un negocio familiar dándole aires de modernidad.
Teníamos ganas de probar el Restaurante Alberca y no nos decepcionó. Ubicado dentro del casco histórico de Trujillo, en la provincia de Cáceres (Extremadura), para llegar al lugar hace falta subir las empinadas calles de piedra de la localidad extremeña, un recorrido que merece mucho la pena.
El local tiene dos plantas, con un salón en la zona baja y otro en la planta de arriba, además de varias mesas en la terraza, donde también se encuentra el acceso a la cocina. Nosotros estuvimos en el salón de arriba, perfectamente decorado, con un estilo rústico pero moderno, y con tres pequeñas bodegas preciosas.
El chef Mario Clemente y su hermana cogieron el relevo de manos de sus padres, quienes lo abrieron en 1997. Es característica del local sus josper de leña de encina, que dan un sabor especial a todas sus elaboraciones.
Entramos en materia. El restaurante tiene dos menús degustación y su carta, no muy extensa, aunque suficiente. Nuestra recomendación es probar el menú degustación, sobre todo la primera vez que se visita el local.
Clemente usa productos extremeños y de la zona, ya hemos hablado antes aquí de la calidad de los productos que tienen allí, dándoles un toque distinto y versionándolos de una manera especial. Nosotros probamos el menú degustación Humo, compuesto por 11 platos y con un precio de 44 euros por persona, todo una experiencia para el paladar.
Todo estaba exquisito, destacando por encima del resto el entrecot de vaca extremeña con una maduración de entre 45 y 55 días. También estaba para chuparse los dedos la yema a la brasa y la mantequilla de cabra ahumada.
Es de destacar el servicio, muy atento y encantadores además de rápido, algo muy importante en un menú degustación, haciendo el tiempo entre plato y plato más que corto.
Todo esto le ha valido al Restaurante Alberca para conseguir la categoría Bib Gourmand 2022 otorgada por la Guía Michelin, una categoría que identifica a los restaurantes que ofrecen una muy favorable relación calidad-precio, con un menú completo por no más de 35 euros.
Paladar Caballa 